Resaca de domingo, pero esta vez no es un dolor de cabeza como de costumbre. Es una sensación de rabia, incomprensión, incredulidad. Todavía con el susto en el cuerpo nos seguimos preguntando cómo llegó a suceder semejante locura en Logroño.
Pero, no está todo perdido. Hay algunos que, además de preguntarse el por qué, han actuado. Un grupo de jóvenes ha “madrugado” este domingo para, de forma totalmente voluntaria y con todas las ganas del mundo, limpiar los destrozos y los restos del desastre de la noche pasada.
Han llegado a primera hora de la mañana al Paseo del Espolón, en torno a las 9 de la mañana. “Hablamos anoche por el grupo de WhatsApp que tenemos para quedar. Mi madre es barrendera y al ver todo esto me frustré porque se desloma cada día”.
Los jóvenes, de entre 15 y 17, años explican que “nos parece una vergüenza. Esto es vandalismo y siempre pagamos justos por pecadores. Con lo que pasó ayer estaremos en el punto de mira, pero queremos demostrar que no todos los jóvenes somos iguales”.
