“Como cada año, llega la vendimia sin que la mayoría de los viticultores conozcan el precio que recibirán por sus uvas”. Ante esta situación, las organizaciones profesionales agrarias riojanas exigen que las transacciones de compra‐venta de uva cumplan la normativa vigente, es decir, que se realicen mediante contratos que reflejen el precio y los costes de producción, y detallen a su vez el plazo de pago.
Respecto a los costes de producción (estimados por la Consejería de Agricultura entre los 0,65 y 0,67 euros el kilo para la uva tinta y 0,54 para la blanca), ARAG-ASAJA, UPA Rioja y UAGR‐COAG recuerdan que para esta campaña los viticultores riojanos han tenido que soportar el incremento de costes al tener que aplicar la exigente normativa anti COVID19.
Esta misma se ha conocido que Campo Viejo comprará un millón de kilos de uva tinta a 64 céntimos a viticultores de Mendavia, según ha publicado Diario La Rioja. La compañía, la principal compradora de uva de Rioja, cierra en 73 céntimos el pago para la agrupación de Fuenmayor, añadía la citada información.
“La situación sanitaria actual está obligando a los agricultores a adoptar medidas excepcionales en su explotación, medidas que suponen un gasto extraordinario a una campaña normal. A esto se ha sumado además un mayor gasto en fitosanitarios y gasóleo por la aparición de enfermedades en el viñedo como el mildiu”, recalcan.
Las OPA consideran que la situación del mercado del vino de Rioja no es tan catastrófica como hace unos meses se vaticinaba, ya que los datos de comercialización hasta julio ofrecen un descenso del once por ciento, muy lejos del treinta por ciento que hace meses se pronosticaba. Esto, unido a las expectativas de cosecha amparada para esta campaña, colocará la ratio (relación entre existencias y ventas) en el entorno del 3,6 a final de año, una ratio no muy superior a la de diciembre de 2019 (3,3).
Las organizaciones agrarias solicitan a las administraciones públicas su implicación para que velen por la efectividad y el cumplimiento de estos contratos e insten a las bodegas a pagar la uva a precios dignos, en cumplimiento de la ley de la Cadena Alimentaria (modificada tras las movilizaciones del sector agrario al inicio de año).
En este sentido, las tres OPA aseguran que denunciarán los incumplimientos que les lleguen ante la Agencia de Control e Información Alimentarios (AICA), manteniendo el anonimato de los viticultores afectados.
