El BM Logroño se aproxima a una temporada llena de dudas, fundamentalmente derivadas de la crisis del COVID-19. Jaime González, su gerente, pide precaución: “En nuestra situación, plantearse objetivos es aventurado. Nos viene un año de incertidumbre y creo que no estamos para eso”. El club no competirá en Europa para no arriesgar la viabilidad del club: “Hemos decidido no jugar porque hemos valorado todo”. Como se suele decir, mejor prevenir que curar.
En otro aspecto, la entidad salió de la ASOBAL por desavenencias con Adolfo Aragonés, presidente de la liga. Pese a ello, seguirá compitiendo en las competiciones nacionales: “Hasta que no se vaya ese señor, no tenemos nada que negociar y por eso nos hemos marchado”. El conflicto entre la Liga y la Federación Española de Balonmano también salpica al calendario liguero. En principio, los franjivino debutan en Santander ante el Liberbank Cantabria el próximo 2 de septiembre. Sin embargo, el Comité de Competición impugnó este sorteo y ahora toca esperar a su resolución.
Hablando en términos puramente deportivos, la plantilla se compone de los siguientes dieciocho jugadores: Jorge Pérez, Miguel Sánchez-Migallón, Délcio Pina, Mario Dorado, Erik Balenziaga, Agustín Casado, Antonio Serradilla, Ernesto Goñi, Rangel Juan, Domen Sikosek, Gabriel Ceretta, Tomás Moreira, Oswaldo Maestro, Eduardo Ortiz, Eduardo Cadarso, David Cadarso, Hackbarth y Javier Romeo.
En el capítulo de bajas, este verano han hecho las maletas Sergey Hernández y Lazar Kukic (Benfica); Patrik Ligtvari (Telekom Veszprem), Imanol Garciandia (PAUC), Tomislav Kusan (Eurofarm Pelister), Junior Scott (Balingen-Weilstetten) y Gianluca Dapiran (Trieste). Acostumbrado a este trasiego, el club pierde talento cada verano y lo contrarresta con savia nueva: “Desde hace años hemos optado por este modelo, viene gente con proyección y por ahora, nos sale bien”.
Incertidumbre social
El club no ha querido lanzar todavía su campaña de abonados, a la espera de que se concrete el calendario definitivo, el protocolo para asistencia de público en el Palacio de los Deportes y la confirmación definitiva del inicio de la temporada: “Hay que cambiar el concepto de reuniones y plazos, ahora no tienen sentido. Decimos una cosa hoy y mañana por la mañana igual no sirve para nada”.
En medio de toda esta incertidumbre, el gerente pide proporcionalidad. “Creo que las autoridades son justas con todos, no voy a andar criticando a nadie ni entrando a comparar”, explica, en relación a otros espectáculos como los toros o las terrazas de los bares. Sí es consciente de que habrá pérdidas, pero no se atreve a valorarlas todavía. La precaución marca su discurso: “No sabemos todavía si habrá público, en qué condiciones…”.
El BOR (Boletín Oficial de La Rioja) reflejó el 20 de junio lo siguiente con respecto a la presencia de público en las competiciones deportivas: “Las competiciones podrán desarrollarse con público siempre que se garantice una distancia interpersonal de seguridad de 1,5 metros, este permanezca sentado y no se supere el 75 % el aforo permitido, con un límite máximo de mil personas, tanto para público, tanto para lugares lugares cerrados y como actividades al aire libre”. Unas condiciones a las que se une la obligación de usar mascarillas. Así pues, parece probable la presencia de aficionados en el Palacio de los Deportes, salvo cambio drástico del panorama sanitario.
