La Rioja

Anguiano guarda los zancos y las castañuelas: “Supone mucha pena”

La tradición tiene más de cuatrocientos años. Sólo la Guerra Civil había podido con ella. Y ahora, el COVID-19. No habrá danzadores en Anguiano bailando por su famosa cuesta. España Directo (RTVE) ha hecho una visita a la localidad serrana. “Este año, con pena, aquí estamos guardando los zancos”, señala David Neila, quien este año colgaba las castañuelas. Resignación y tristeza. “Qué pena no poder darles”.

En el restaurante Valdevenados, Tere también asume que no haya danzadores con resignación: “Es la facturación más grande de todo el año y lo que nos ayuda a pasar la temporada baja”. Con cocer tres kilos de alubias al día saca la comida adelante. “Supone mucha pena”, confiesa también el tamborilero Alejandro. “Los danzadores se quedan blancos mirando a la virgen. Y este año con más razón”, añade.

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