Siempre que llega el crudo invierno, los operarios municipales invierten semanas en podar los árboles de sus localidades para sanear las ramas de cara a su próxima floración. Bien pensado, todo ese tiempo se lo podrían ahorrar los pobres jardineros si les sorprendiera una granizada como la de este jueves en el Valle del Oja.
Era previsible que el frente tormentoso que había castigado las Siete Villas dejase también su efecto en las localidades a su paso, pero lo que han presenciado los vecinos de Santurdejo es de esas cosas que no se olvidan fácilmente. En cuestión de minutos, han comprobado cómo la ‘pedrada’ ha pelado casi por completo los árboles de la localidad, cuyas calles se han cubierto por un manto blanco en cuestión de minutos.
