La Rioja

El COVID-19 no frena al fuego en Calahorra en la noche más mágica del año

Se podía celebrar o no celebrar. Cada uno en Calahorra tenía su opinión al respecto y muchos la hicieron ver a lo largo de la jornada por las redes sociales. Algunos pensaban que era una imprudencia, otros que cumpliendo las normas se podía disfrutar del acto. Finalmente, el ayuntamiento decidió celebrar la noche de San Juan en el parque del Cidacos con música, chocolate y hoguera. Eso sí, bien separada unas de otras las localizaciones para evitar aglomeraciones. Y no las hubo.

Mucha gente decidió no bajar. Otros bajaron, comprobaron la situación y decidieron quedarse. La mayoría fue gente joven y familias con niños. Todos con mascarillas y guardando las distancias de seguridad entre grupos. “Había más gente el primer día que se pudo salir a hacer deporte”, decía alguno de los habituales al parque.

No fue una noche de San Juan habitual. Pocos saltos en la hoguera y la música más bien bajita para que la gente no sucumbiese al baile. Una noche de San Juan en la que algunos aprovecharon como otros años para quemar sus deseos en la hoguera y otros para charlar en grupo y volver a ver a gente que no veían desde hace más de tres meses. “Nuestra idea es hacer todos aquellos actos en los que se pueda controlar que las cosas se hagan bien y que se cumplan las normas”, decía la alcaldesa, Elisa Garrido, mientras se prendía la hoguera a eso de las diez de la noche.

A primera hora bajaron personas mayores (pocas) a probar el chocolate que habían hecho el grupo scout. Luego fueron pasando por allí los más jóvenes. La hoguera estaba ubicada en el mismo emplazamiento que otros años y el chocolate se daba más cerca de la catedral. Entre medio, el heladero, que con el calor de la noche apetecía. Al final un acto como van a ir siendo los de la “nueva normalidad”. Sin demasiada gente y con mucha seguridad.

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