El presidente de ARAG-ASAJA, Eduardo Pérez, se ha mostrado este miércoles “escéptico” ante la aplicación del Real Decreto-Ley de medidas urgentes de carácter temporal en materia de empleo agrario que el Gobierno nacional aprobó ayer, ya que tiene serias dudas de que ayude a resolver la falta de mano de obra para las próximas campañas agrícolas.
Pérez ha participado en la videoconferencia de la mesa de diálogo agrario que ARAG-ASAJA había solicitado para analizar el impacto económico que el Covid-19 está ya causando en el sector agrario y ganadero de La Rioja.
Entre los temas tratados, las OPA y Fecoar han compartido su inquietud sobre la situación del sector agrario en cuanto a la comercialización de productos afectados por el cierre de la hostelería, como pueden ser la carne de ovino y caprino y el vino o la necesidad de promoción de los productos de La Rioja. Y han analizado conjuntamente la necesidad de hasta 5.000 trabajadores para afrontar las próximas campañas agrícolas en La Rioja.
Para el presidente de ARAG-ASAJA, las condiciones recogidas en el Real Decreto van a ser “de difícil aplicación” para los agricultores, por lo que ha pedido “flexibilidad y coordinación entre las diferentes administraciones para que, al menos, en lo relativo a la movilidad de los trabajadores dentro de la comunidad, ésta sea lo más amplia posible”.
Además, ha compartido su “preocupación y mostrado su disconformidad” con que el Ministerio haga responsable a los agricultores en estas circunstancias de la entrega de los EPI necesarios a las personas que contraten para estas campañas, dado que existe un grave problema de suministro de este material hasta para las propias comunidades autónomas.
Finalmente, Pérez ha reconocido que no va a ser una campaña normal y que es consciente de que las dificultades que comporta la crisis sanitaria pero no va a quedar otra que adaptarnos y sacarla adelante”.
