Diario de un profe ‘en cuarentena’
“La soledad es muy hermosa, cuando se tiene a alguien a quien contárselo”,
Gustavo Adolfo Bécquer
Dormir casi una hora más. No perder tiempo afeitándome. Ponerme lo mismo de ayer. No haberlo tenido que planchar. No pasar frío al ir a coger el coche. No tener problemas a la hora de aparcar. Haber fichado ya. Llevarme el café a clase. Almorzar con mi pareja. Librarme de hacer el recreo. Seguir calentito. Poder echar un cigarrito. Haber cumplido ya todas las guardias de la semana. Volver a picar algo en la nevera. Y las del aula de convivencia. Apagar el ordenador. Volver a casa en un instante. Comer a las dos en punto…
…todo ventajas. Y todas ellas, las cambiaría ahora mismo por volver a tenerlos delante.