La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, denuncia que seis de los doce retenes contra incendios de los que dispone la Comunidad Autónoma de La Rioja no cuentan con un oficial de primera al frente de su unidad, tal y como dispone la reglamentación.
Sus funciones las tiene que realizar un operario sin formación adecuada y sin la correspondiente retribución. El anterior gobierno regional dejó numerosos temas pendientes de solución para este colectivo con graves problemas laborales que tampoco se han solucionado con la entrada del nuevo Ejecutivo.
En concreto, La Rioja dispone de doce retenes destinados a trabajos de prevención y extinción de incendios, con un presupuesto aprobado para que cada uno de los mismos disponga de ocho operarios, pero en la actualidad no están cubiertos en su totalidad, dándose retenes con tan solo cuatro trabajadores y sin un oficial al mando. Esta circunstancia afecta a la mitad de los retenes.
Para solucionar la falta de oficiales de primera, encargados de dirigir las cuadrillas y conducir el vehículo pertinente, la Administración ha optado por establecer un calendario rotativo y de obligado cumplimiento para los operarios que deben realizar estas funciones, pero sin formarles debidamente ni retribuirles en consonancia.
A los operarios con funciones de oficial se les entregan tres hojas informativas como única formación para realizar un trabajo que requiere, no sólo una preparación específica, sino además unas destrezas para la conducción de vehículos todoterreno en determinadas circunstancias, debiendo ocuparse además de atender la emisora y el teléfono.
En este sentido, CSIF denuncia la gravedad de esta situación ya que hay vidas en juego al tratarse de trabajos arriesgados en el monte, con maquinaria especial y, muchas veces, en las peores condiciones meteorológicas o en labores de extinción de incendios con el consabido peligro que ello entraña.
Hasta ahora, al personal de retenes se les está obligando a realizar funciones de superior categoría sin una compensación económica. Tampoco cobran reservas, ni guardias, ni horas de intervención, como el resto del operativo contra incendios.
A estos trabajadores se les paga a 10 euros la hora por jugarse la vida. Este sindicato exige la equiparación de las condiciones laborales y económicas de los retenes con los del resto de trabajadores del operativo de extinción de incendios, como primera medida inaplazable.
Por otra parte, CSIF recuerda que el artículo 8 del Convenio Colectivo para el personal laboral de la Comunidad Autónoma de La Rioja establece que “la realización de trabajos de categoría superior e inferior responderá a necesidades perentorias o imprevisibles de la actividad y durará el tiempo imprescindible para su atención”.
Este mismo artículo, en su apartado 5, determina que “en ningún caso el mero desempeño de trabajos de superior categoría sea considerado como mérito en la respectiva convocatoria”.
Por tanto, estos trabajadores no tienen ningún beneficio y, en cambio, asumen una gran responsabilidad y en muchas ocasiones la incomprensión de sus subordinados y compañeros.
CSIF exige al nuevo Gobierno regional que ponga una solución urgente a la situación que sufre este colectivo y que, hasta la fecha, la Administración riojana no ha sabido o no ha querido remediar, ignorando la importancia de su labor y la responsabilidad que asumen estos trabajadores .
