La tarde de este miércoles en Logroño va de vinos, pero también de comercio internacional y actualidad vitivinícola. Para ello, quién mejor que dos expertos como el director general de la DOCa Rioja, José Luis Lapuente, y el secretario general de la DO Ribera del Duero, Alfonso Sánchez. Y para no desvincularse mucho del sector, el Calado ha hecho de escenario para esta conferencia enmarcada dentro del la presentación de la revista Diario de Vendimia.
Un diálogo entre Rioja y Ribera del Duero, moderado por el periodista Fernando Bóbeda, en el que se ha aludido a la ya tratada durante estos meses vendimia de 2019. Con “una riqueza aromática muy interesante” se presenta esta cosecha que Lapuente considera que “hace un buen tributo al trabajo no recompensado durante años anteriores”.
Dos de las denominaciones con más prestigio internacional también ha tratado sobre la situación del mercado del vino. “El consumo de vino es un reto y y nos obliga a que el sector vaya de la mano. Somos de los mayores productores del país pero los que menos consumo per cápita reflejamos”, señala Sánchez.
Mientras, Lapuente ha destacado que “la dependencia que tiene la región hacia el producto no deja más opciones que tirar hacia delante y buscar soluciones”. Así, ha recordado que “se ha puesto el foco en el origen, en los viñedos singulares, en los de pueblo y también en los rosados, pero nada de eso va a revolucionar Rioja”.
Durante la conferencia, presentada por el director de Ibercaja en La Rioja, Jesús Les, se ha aludido también a la presencia de los jóvenes en el sector vitivinícola. “No hemos sido capaces de transmitir a nuestros hijos lo que hay detrás de cada vino, por lo que habrá que esperar a que se enamoren del producto”, considera Lapuente.
Los vinos del futuro
Por su parte, Sánchez ha incidido en la necesidad de “no asustar a la juventud porque hay que transmitir que el mundo del vino está íntimamente ligado al mundo de la cultura y la familia, unos valores que hay que intentar reflejar adecuadamente en este público”.
Y así, con un ‘estrechón de manos’ entre Rioja y Ribera de Duero, ambas Denominaciones se han agradecido mutuamente su ayuda. “Rioja ha sido nuestro referente desde el principio”, mientras que “de Ribera del Duero nos ha atraído su agilidad y apoyo”.
