El centenar de voluntarios que han velado por que el arranque de las fiestas de San Mateo fuese lo más seguro posible ha atendido a 82 personas entre la jornada del viernes y la del sábado. De esas intervenciones, en treinta de ellas fue preciso trasladar a los afectados a centros sanitarios.
Como era de esperar, el servicio preventivo del disparo del cohete fue el más ‘agitado’ para Cruz Roja, pues los recursos desplazados atendieron a 24 ciudadanos por caídas, contusiones e intoxicaciones etílicas, siendo necesario el traslado de cinco de ellos a un centro sanitario. En las horas posteriores al cohete, los voluntarios del puesto fijo de atención (apoyado por una ambulancia) atendieron a nueve personas, de las que tres requirieron traslado a un centro sanitario para su observación. En conjunto, la jornada del viernes se cerró con un total de 51 atenciones, con 22 traslados a centros hospitalarios.
Más tranquila resultó la jornada del sábado, en la que Cruz Roja atendió a 31 personas, la mayor parte de ellas por traumatismos en el recinto ferial, con un total de diez intervenciones. En la primera suelta de vaquillas un recortador fue atendido en la enfermería de la plaza de toros de La Ribera por un ‘varetazo’ y otros dos espectadores fueron atendidos por Cruz Roja. Durante el acto institucional del Pisado de la Uva otras dos personas recibieron asistencia médica por problemas leves.
En el pasacalles de Gigantes y Cabezudos no se registró ninguna incidencia, mientras que dos personas fueron atendidas en el puesto de primeros auxilios de la Plaza del Mercado y otras dos en la feria taurina. En los fuegos artificiales Cruz Roja atendió a dos ciudadanos con carácter leve, mientras que en el concierto de La Unión en la Plaza del Ayuntamiento tres personas recibieron asistencia “por enfermedad común”, siendo necesario el traslado de dos de ellas al Hospital San Pedro
