Nuevo movimiento en el accionariado de algunas bodegas de la Denominación de Origen Calificada (DOCa) Rioja. En concreto, el capital de Bodegas Solar (de Laguardia), de más de 75 años de historia, pasa de las manos de Freixenet a las de Pedro Ferrer, su actual propietario.
La firma de Rioja Alavesa se incluye en la oferta lanzada por Ferrer (a través de Ferrer Miranda, compañía de nueva creación propiedad del vicepresidente de Freixenet y sus dos hijos) por cuatro bodegas: la propia Solar Viejo, Vionta (Rías Baixas), Valdubón (Ribera del Duero) y Finca Ferrer (en el argentino Valle de Uco); además de las marcas Monólogo y Orube.
Así lo detalla la información publicada esta semana por el diario ‘salmón’ Expansión, que estima que con este nuevo movimiento el grupo Ferrer Miranda facturará 18 millones de euros en este primer año gracias a la comercialización -gestionada a través de Freixenet gracias a un acuerdo de cooperación estratégica- de cuatro millones de botellas en 85 países. En cuanto a sus recursos humanos, su plantilla asciende a 55 trabajadores, repartidos entre España y Argentina
Expansión encuadra esta operación en la estrategia de Freixenet (cuyo 50 % controla el grupo alemán Henkell y el resto la familia Ferrer) para centrar sus esfuerzos en el sector del cava y reducir su inversión en la elaboración de vino.
