En el campo no hay tiempo de tranquilidad. Cuando llueve porque llueve, cuando hace calor porque hace calor y cuando no hace nada porque puede pasar cualquier cosa en cualquier momento. Ahora son momentos de cierta inquietud: el frío de estas noches tiene en alerta a los agricultores. Y a tenor de las imágenes dejadas en la zona de Rioja Alavesa, por la helada la noche del miércoles al jueves, parece justificado el susto.
“Ha sido un hielo más llamativo y visual que peligroso. Los daños han sido muy mínimos”, reconoce David Castro, de Garañango Asesoría y Servicios Agrarios, refiriéndose a la zona de Laguardia, Navaridas, Elciego o Haro. Aunque también ha comprobado el entorno de San Asensio y Cihuri y el balance es positivo.
Foto: David Castro.
“La gente está regando porque está muy seco y eso ha hecho que la helada sea más espectacular, por la existencia de agua, pero mientras que se genera costra en el pámpano la helada queda como algo superficial. Y luego es cuestión de seguir regando para que el hielo no penetre en el interior”, apunta a este medio. Esa fue precisamente una de las opciones que eligieron algunos agricultores en mayo de hace dos años, cuando asoló la gran helada, y salieron victoriosos. “Nunca se sabe cómo acertar”, asegura Castro.
Pero si algo tiene el campo y los agricultores es memoria y esa citada helada de 2017, en plena primavera, hace que los agricultores vivan jornadas de tensión en estas fechas. “Hay miedo a las heladas, eso es evidente y cuanto más avanzada esté la planta las consecuencias son mayores”. De momento, “no están tan adelantado el desarrollo vegetativo como parecía, tan solo unos días en comparación con un año normal, porque ha habido una parada. Eso hace que el daño sea menor”.
Foto: David Castro.
Y, ¿cómo reacciona el viñedo ante una helada: varía mucho en función de la edad de la cepa? “Afectar afecta igualmente al viejo y al joven, pero es evidente que el joven brota con más vigor”. Como las personas entonces… “Igual, las plantas jóvenes recuperan antes”, ríe.
De cara al corto-medio plazo, ¿cómo se presentan las previsiones? “Para la próxima semana lo previsto es que se descuelgue el aire frío y haya temperaturas más bajas; la cuestión será ver si se llega a estar por debajo de cero y cuánto tiempo”, señala el técnico de Garañango. “Habrá que esperar a esos períodos fríos con lunas llenas para valorar qué ocurre”.
Porque si algo mantiene en vilo al campo es que se cumpla uno de los refranes: “Marcos, Marquete, vendimiador sin corquete”, en referencia al riesgo de heladas que suele surgir en la cercanía de la festividad de San Marcos, el 25 de abril, y que cuando pasa tiende a echar al traste la cosecha. Que San Marcos se quede solo en un día de romería para algunos pueblos, pero nada más.
