La plataforma Stop Desahucios de Álava ha realizado este miércoles una concentración frente a la sede de Ibercaja Banco de Vitoria para exigir la paralización del desahucio de Chuse, un vecino de 50 años que reside en Lapuebla de Labarca, señalado para el jueves de la próxima semana.
Foto: Stop Araba
Según relata este colectivo, esta persona adquirió una vivienda en el municipio de Rioja Alavesa en el año 2007, pero un tiempo después sufrió una lesión en la columna vertebral, perdió su empleo y, desde entonces, ha venido realizando trabajos en el campo de forma esporádica, teniendo que recurrir a menudo a los servicios sociales.
Hace cuatro años encontró dificultades para hacer frente a su hipoteca y dejó de abonar siete cuotas (con un importe total de 2.500 euros), por lo que Ibercaja le reclamó la totalidad del préstamo, que ascendía a 95.000 euros. La cosa acabó en juicio y el banco adquirió la vivienda por el 70% de su valor, al no poder hacer frente Chuse a la deuda que se le reclamaba. El pasado mes de diciembre, Ibercaja transfirió la casa a un fondo buitre sueco, Intrum, que ha instado a su desalojo.
“Si me desahucian lo pierdo todo: lavadoras, electrodomésticos varios… Tendré que tomar una tienda de campaña y tirar hasta donde las piernas me lleven”, ha señalado Chuse, remarcando que perdería el empadronamiento si es desahuciado: “No sé que podría hacer. No descarto nada, estoy en tratamiento”.
Fuentes de Ibercaja han señalado a NueveCuatroUno que un comité interno evalúa los casos para ofrecer las diferentes posibilidades a sus clientes, sólo ejecutándose el desahucio como última opción. En todo caso, han querido resaltar, el que ejecuta el desahucio de Lapuebla es el ‘fondo buitre’, que en este caso era el acreedor.
Existe -según apunta Stop Desahucios- un informe de vulnerabilidad redactado por una trabajadora social que advierte de que Chuse “está medicado y requiere atención psiquiátrica, pero no habla nada de de alternativa habitacional, tal y como exige Naciones Unidas”.
Stop Desahucios recalca que en la zona donde reside este vecino de Lapuebla “hay otras casas vacías, pero ninguna disponible para alquilar”, por lo que reclama a los nuevos propietarios del inmueble que le dejen vivir en él a cambio del pago de un arrendamiento social. La plataforma insiste, además, en que este vecino “está totalmente integrado en esta zona rural, donde quiere seguir buscando un trabajo estable”.
Para ello, el colectivo apela a las resoluciones aprobadas por las Juntas Generales de Álava en octubre de 2015, en las que declaraba la provincia ‘territorio libre de desahucios’ y la Administración se comprometía a mediar con el banco para encontrar una alternativa y, en última instancia, proporcionarle una alternativa habitacional a las personas desahuciadas.
La colaboración del fondo
Stop Desahucios Álava señala que “Ibercaja fue rescatada con más de 400 millones de ayudas públicas, y que ha contratado a Rothschild para salir a bolsa, se está saneando en colaboración con el Intrum, que domicilia operaciones en paraísos fiscales como Islas Mauricio o Luxemburgo, compra paquetes de deudas impagadas por cuatro perras, y luego actúa agresivamente para obtener beneficios, por lo que tiene multitud de denuncias en la Agencia Estatal de Protección de Datos y en las Oficinas del Consumidor”.
En marzo de 2017, Ibercaja obtuvo la autorización del Banco Central Europeo (BCE) para proceder a la amortización anticipada de 223,6 millones de euros de las obligaciones contingentemente convertibles (‘CoCos’) emitidas por Banco Grupo Cajatrés (Caja3) en 2013, cuya materialización estaba prevista para diciembre de 2017.
