La presencia de nieve sobre la calzada eleva la complejidad de la circulación en todos los casos, pero especialmente en aquellos en los que el vehículo es de gran tonelaje y, sobre todo, transporta a pasajeros.
En cualquier caso, la mañana de este sábado está siendo dificultosa para los servicios de autobuses pero, por fortuna, apenas hay que reseñar dos incidencias en la ruta comercial entre Logroño y Madrid. El corte al tráfico en el puerto de Piqueras ha afectado a dos vehículos de la compañía ALSA en forma de retrasos.
Según ha trasladado la empresa de transportes a NueveCuatroUno, una de sus rutas ha estado una hora y media detenida en la carretera con sus pasajeros a bordo mientras los operarios retiraban la nieve de la calzada en la N-111 y la otra ha experimentado un retraso de media hora.
La compañía no ha sabido precisar si el sentido de circulación de dichos autobuses era Logroño-Madrid, Madrid-Logroño o cada uno de ellos circulaba en un sentido. En cualquier caso, tal y como a las nueve de la mañana se restablecía el tráfico en esa vía la normalidad ha regresado también a la línea.
La otra gran compañía que conecta las capitales de España y La Rioja, PLM, ha trasladado “total normalidad” en la circulación a este medio. En lo que llevamos de jornada no se ha registrado ninguna incidencia que afecte a la línea Logroño-Madrid.
