La nieve tiene ese cariz bucólico, mágico… Ese poder de convertir lo normal en bonito y lo bonito en excelso. Así ha ocurrido este sábado en la sierra camerana. Y si se habla de un lugar con encanto ya de por sí, como Laguna de Cameros, si encima lo cubre una capa blanca, el escenario se convierte en un paraje de cuento, casi de estilo navideño.
Así que además de las incomodidades que ha provocado este temporal ‘Helena’, en cuanto a movilidad, también es cuestión de ver esta nevada como una ocasión de disfrutar de imágenes para guardar en la retina. Suerte que las cámaras de fotos ayudan a ejecutar ese ejercicio de memoria.
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