Mucho se había hablado en las últimas semanas del árbol cónico que el Ayuntamiento de Logroño iba a instalar en la capital riojana. A ello contribuyó el pequeño ‘troleo’ que sufrió el programa humorístico ‘La Vida Moderna’ (Cadena SER) y el misterio sobre su fecha de inauguración, su ubicación y sus metros totales.
Todo era una incógnita hasta el pasado viernes, cuando los 100.000 puntos de micro led comenzaron a brillar en la esquina del Paseo del Espolón, junto a la confluencia de Miguel Villanueva con Avenida de Portugal. Desde entonces, logroñeses y visitantes no han podido resistirse a entrar en el árbol para darle al botón de la cámara.
Click. Selfi. Click. Foto divertida. Y de ahí, a las redes sociales. Basta darse una vuelta por Facebook, Twitter, Instagram… para ver a numerosos conocidos visitar el ‘arbolito’ -veintiún metros de alto y ocho de diámetro-, cuando no son los propios familiares o amigos quienes nos mandan las instantáneas para fardar de momento ocioso.
Pequeñas polémicas aparte, como el gasto de 25.000 euros que ha supuesto a las arcas municipales, lo cierto es que el árbol se ha convertido en una de las principales atracciones de está época en Logroño, junto al Mercado de Navidad que se encuentra a escasos metros.
