Calahorra vivió ayer su primer día de festejos en honor de San Emeterio y San Celedonio, con chupinazo, encierro, fuegos, concierto… Un programa completo que también vivió la otra parte de las fiestas: la de los sustos que acaban en atenciones médicas.
Así, en el estreno de las celebraciones calagurritanas, como informa Cruz Roja La Rioja, fue necesario asistir a una veintena de personas en el cómputo total. Por actos, el chupinazo fue el que más atenciones requirió con diez personas, de las cuales tres fueron trasladas a centro sanitario.
El encierro de la tarde y la posterior suelta de vaquillas se saldó con seis asistencias, una de ellas también trasladada. Ya en horario nocturno, en los fuegos artificiales tres personas fueron tratadas por Cruz Roja La Rioja pero por cuestiones leves, al igual que la que tuvo que ser atendida en el concierto, donde actuaban Hombres G.
