Estar enamorado es descubrir lo bello que es la vida, confundir la noche con los días, caminar con alas por el mundo y vivir con el corazón desnudo. No lo decimos nosotros, sino que dejó constancia de ello el gran Raphael. Cuando las mariposas revolotean por el estómago la belleza del entorno se multiplica y los sitios bonitos se convierten en, sencillamente, mágicos (esto sí es de nuestra cosecha).
Es por eso que Rachel Lindsay, que lleva a gala ser la ‘Novia de América’ no ha dudado en regresar un año después a La Rioja, donde conoció el amor junto a Bryan Abasolo. Aquello, más que un flechazo, fue una conquista en toda regla. Porque Rachel era la protagonista de ‘The Bachelorette’, el programa estrella de la ABC (la cadena de televisión, no el periódico monárquico) en el que la chica debía pasar revista a varios candidatos antes de decidir a cuál se llevaba a la vicaría.
El espacio lleva la friolera de cuarenta años en parrilla, por lo que su éxito está ya más que tostadito y los protagonistas de su última edición han hecho lo mismo que los tortolitos que nos visitan a lo largo del año: dejar constancia en las redes sociales de sus brindis con Rioja y de su paso por la calle Laurel. En sus agendas también han encontrado un huequito para visitar la sede del Consejo Regulador de la DOCa Rioja.
