El Sereno

Bebé precavido vale por dos

En 1948 Vittorio de Sica sentó las bases del neorrealismo italiano armando un relato dramático en torno al robo de una bicicleta. Seguramente, eso es algo que le suene a chino al protagonista de esta entrega de El Sereno, a buen seguro más familiarizado con otras parcelas de la ficción como la Patrulla Canina, Lady Bug o Peppa Pig.

No sabemos su nombre. Ni siquiera si es niño o niña (no vamos a caer en la trampa sexista de pensar que se trata de una chiquilla solo porque su vehículo es rosa). La estampa solo nos revela dos cosas: que a montar en moto se aprende a base de caídas (la maltrecha pegatina de los Trolls y los arañazos del carenado dan buena cuenta) y que un bebé precavido vale por dos.

Son varias las preguntas que nos asaltan al toparnos con esta motocicleta de juguete anclada a un aparcamiento para bicicletas de la calle Juan XXIII de Logroño. ¿Qué edad tiene la criatura?, ¿quién fue el ideólogo del plan, el propio peque o sus progenitores?¿Tal vez nazca de unos abuelos superprotectores?… Pero sobre todo, ¿quién puede ser tan desalmado como para robar los sueños que cabalgan sobre esas dos ruedas de plástico? Hay una respuesta que tiene bastante clara el anónimo propietario de la moto: mejor prevenir que lamentar.

*Puedes enviar cualquier ‘denuncia’ para la sección ‘El Sereno de NueveCuatroUno‘ a través del correo electrónico o al WhatsApp 600830812.

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