El BM Logroño se ha despedido este sábado de sus aficionados con un claro triunfo (32-28) sobre el Blendio Sinfín cátabro, que plantó cara en la primera mitad y en general hizo un partido correcto, pero en el segundo tiempo no pudo compensar la velocidad de los riojanos, que se aseguran así al menos ser cuartos de la Liga Asobal e incluso podrían acabar terceros.
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El equipo riojano cimentó su victoria en el inicio del segundo tiempo algo, en en realidad, demuestra la dificultad que puso en el encuentro el equipo que entrena Rubén Garabaya, que impuso su táctica en el primer tiempo, en el que no dejó correr a los locales.
Además, el Sinfín mostró una buena eficacia en sus ataques y eso le permitió manter el partido totalmente equilibrado casi todo el primer tiempo, con continuos empates que solo se rompieron minutos antes del descanso, cuando Xoan Ledo saltó al parqué y encadenó cuatro buenas paradas que, unidas a sendas acciones de Uríos y Eduardo Cadarso colocaron a los locales con una ventaja “cómoda” de tres goles al descanso (14-11).
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Tras el paso por vestuarios a quien le salió bien el plan de juego fue al Logroño, que planteó, como en otras ocasiones, un juego marcado por la velocidad y vio como su rival no podía responder a eso.
Así, poco a poco la distancia en el marcador fue creciendo a favor del equipo local, hasta asentarse en los siete y ocho goles de diferencia (25-18 al cuarto de hora y 30-22 cinco minutos después).
El Sinfín se entregó, consciente de que la distancia era demasiado grande y de que ya no tenía la misma fuerza que antes; pero se encontró con un Logroño que tampoco quiso hacer sangre; al contrario, bajó su intensidad en la recta final y permitió un marcador “decoroso” para el equipo de un leyenda del Logroño, Rubén Garabaya.
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Además, para cuando terminó el partido el equipo local ya estaba pensando en otras cosas, en la fiesta que organizó sobre la pista para despedir a los tres jugadores que dejarán su plantilla -aunque queda una jornada y la Copa del Rey-, Eduardo Ortiz, Juan Palomino y, especialmente, el capitán, Eduardo Cadarso, ovacionado por todo el público en un tiempo muerto final pedido por el Sinfín.
Ficha técnica
– Logroño La Rioja (14+18): Xoan Ledo (p), Soler (1), El Korchi (2), Alves Ponciano (1), Uríos (2), Zaja (4), Túa, Preciado (1), Eduardo Cadarso (4), Palomino (4), David Cadarso (4, 1p), Modi (2), Rivero, Javi García (7) y Palasics (p).
– Blendio Sinfín (11+17): Marín (p), Muñiz (1), Alonso (2), Domínguez (1), Castro (2), Aguilella (6), Jozinovic (4), Monzón, Arana, Basualdo (2), Jacob Díaz (1), Lon (4), Da Silva (2), Lozano, Abdelaziz (3) y Gercar (p).
– Parciales: 3-4, 5-5, 7-7, 8-9, 11-10, 14-11 (descanso), 20-15, 23-16, 26-19, 29-23, 32-26 y 32-28 (final).
– Árbitros: Tania Rodríguez y Lorena García. Excluyeron a los franjivinos Rivero y Ponciano, y al visitante Da Silva.
– Incidencias: Unos 800 espectadores en el Palacio de los Deportes de La Rioja.
