Viñedos El Pacto, el proyecto más vinculado al origen de la Compañía de vinos Vintae, ha presentado las nuevas añadas de dos de sus vinos más especiales: Valdechuecas Viñedo Singular 2021 y Riojanda Viñedo Singular 2021. Ambos proceden de dos fincas extraordinarias por su antigüedad, biodiversidad y riqueza, ubicadas en Cárdenas y Navaridas.
Raúl Acha, viticultor y director técnico de Viñedos El Pacto, destaca que “los nuevos vinos reflejan las características de un año seco y cálido, en el que disfrutamos de una vendimia perfecta en Rioja”. En este sentido, recuerda que la meteorología idílica durante la recogida de la uva permitió llevar a cabo una viticultura ecológica y de mínima intervención, lo que dio como resultado vinos con un gran equilibrio.
Las fincas Valdechuecas y Riojanda, declaradas en 2020 como Viñedo Singular por la DOCa Rioja, son conocidas por su biodiversidad y riqueza. Valdechuecas es una finca de menos de una hectárea ubicada en Cárdenas, con una ligera pendiente y suelos arcillo ferrosos. Riojanda, por su parte, cuenta con dos pequeñas parcelas plantadas en 1920 en Navaridas, con suelos arcillo calcáreos y una ligera orientación hacia el este.
Para elaborar Valdechuecas se utiliza un 10 por ciento de la uva sin despalillar, y el mosto fermenta en hormigón. Después, se lleva a un fudre de 2400 litros donde se cría durante doce meses. En la añada 2021 se elaboraron poco más de 5.000 botellas, que salen a la venta con un PVP de 48,65 euros.
Por su parte, Riojanda se elabora con una viticultura ecológica y biodinámica, respetando los ciclos lunares. Se vendimia a mano, se despalilla y el mosto fermenta en tinos con las levaduras salvajes de la uva. En la añada 2021 se elaboraron poco más de 1.300 botellas, que salen a la venta con un PVP de 56,95 euros. El Master of Wine británico Tim Atkin otorgó 95 puntos a Valdechuecas Viñedo Singular 2021 y 93 puntos a Riojanda Viñedo Singular 2021 en su Rioja Report 2024.
Viñedos El Pacto cuenta con 45 hectáreas de viñedo en la comarca del Alto Najerilla, donde tiene sus raíces la familia Arambarri, propietaria de Vintae. El proyecto tiene como objetivo preservar el patrimonio de viñedo viejo con una viticultura natural y manual, fomentando la biodiversidad de sus parcelas.
