Lejos de acercar posturas en las conversaciones de estos días, el PSOE y Podemos se encuentran cada vez más distantes. La investidura de Concha Andreu se antoja altamente complicada para la próxima semana. A falta del voto de la formación morada para que el Gobierno de La Rioja cambie de color (el acuerdo con IU está más que sellado), los socialistas se afanan en convencer a la diputada Raquel Romero para que el “no” sea “sí”.
Sin embargo, esta ni siquiera ha acudido a la llamada que Andreu ha hecho a los líderes políticos para reunirse en el Parlamento de cara a la investidura. Sí lo han hecho Raúl Díaz (PSOE), Pablo Baena (Ciudadanos) y Henar Moreno (IU), frente a Romero y Jesús Ángel Garrido (PP) que han decidido dedicar el viernes a otras labores. ¿Dónde está el problema entonces si ambas formaciones buscan, grosso modo, lo mismo?
A tenor de lo que lleva varios días flotando en el ambiente del pequeño Logroño del poder, el reparto de sillas en el futuro Ejecutivo. La candidata del PSOE ha confirmado este viernes que Podemos ha exigido tres consejerías y sus respectivas direcciones generales, lo que para los socialistas es algo impensable de conceder con el reparto de fuerzas que los riojanos decidieron el pasado 26 de mayo.
Por si alguien se ha despistado a estas alturas de la película, hacemos un pequeño recordatorio. El PSOE ganó las elecciones con quince diputados y Unidas Podemos se antoja desde entonces como la llave para gobernar con sus dos escaños (Raquel Romero -Podemos- y Henar Moreno -IU-). PP y Ciudadanos no suman con sus respectivos doce y cuatro diputados. Tras saltar por los aires esta pequeña coalición a los pocos días de los comicios, sus dos señorías han emprendido caminos separados para llegar a un acuerdo con los socialistas.
Henar Moreno, designada vicepresidenta primera de la Mesa del Parlamento, mostró su apoyo a Andreu desde el principio de las negociaciones y tiene su voto más que decidido. Por tanto, dieciséis “a favor”, dieciséis “en contra” y uno en el aire. La madre del cordero.
“No hay ninguna posibilidad de aceptarlo”
La candidata del PSOE ha subrayado que le hubiera gustado hablar en primer lugar de un acuerdo programático, “pero no hay posibilidad de hablar de acuerdo programático si antes no se habla de consejerías”. “No estamos dispuestos a aceptar de ninguna manera tres consejerías, ni tampoco una”, ha recalcado.
Andreu ha indicado que “en las conversaciones siempre ha habido cargos intermedios sobre la mesa, cómo no, para apoyar un Gobierno progresista” y ha abogado por un Ejecutivo basado en la “corresponsabilidad” y “la proporcionalidad”. Por tanto, con una diputada de las diecisiete necesarias para la mayoría (33 tiene la Cámara), el PSOE considera que no puede tener una silla en el Consejo de Gobierno, pero sí en el Ejecutivo.
La candidata a investirse como presidenta de La Rioja ha detallado que esta semana ha mantenido personalmente dos encuentros con representantes de Podemos para negociar su apoyo, además de una conversación telefónica. Tras calificar la postura de Podemos como “egoísmo barato”, ha confesado que tiene algo en mente “muy bonito” para la región y ha resaltado que “no se puede perder esta oportunidad” después de veinticuatro años de Gobierno del PP.
