La Rioja no es ajena a la situación política nacional. El bloque entre derecha e izquierda también se encuentra fragmentado y las próximas elecciones se decidirán por un puñado de votos, a tenor de lo que dicen las encuestas. El PP volvería a ser la lista más votada en la región el 28 de abril, pero su caída es la más importante.
El reparto de los cuatro escaños riojanos continuará la tónica de las elecciones de 2016, aunque la última silla cambia del color morado de asaltar los cielos al naranja del Mundial del 82. El PP obtendría dos diputados, uno el PSOE y otro Ciudadanos. Podemos perdería su representación riojana en el Congreso y Vox sería la quinta fuerza. El Partido Riojano PR+ quedaría muy lejos del resto.
Así lo refleja ‘El Refractómetro de NueveCuatroUno’, que otorga a los populares el 30,7 por ciento de intención de voto en los comicios generales frente al 42,63 que obtuvo en las últimas elecciones (un descenso de casi doce puntos). Le sigue el PSOE con el 28,2 por ciento y una teórica subida de cuatro puntos (24,33 en 2016).
Ciudadanos mantendría parecida intención de voto en La Rioja (14,6 por ciento), lo que le otorgaría el escaño que pierde Podemos al caer desde el 16,5 por ciento de 2016 al 12,1 que ahora le otorga la encuesta de este medio.
Pese a ser el partido de moda, Vox se quedaría rozando las dos cifras (9,8 por ciento) y muy lejos de obtener representación. El partido liderado por Santiago Abascal sí que superaría al Partido Riojano de Rubén Antoñanzas, que sólo obtendría un 3,6 por ciento de los votos.
Lo que sí refleja la encuesta de NueveCuatroUno es que la cosa está muy apretadita. La tendencia nacional se mantiene y un mayor ascenso de Vox podría, paradójicamente, beneficiar al PSOE si los votos salen del PP. Es decir, dar la vuelta a la tortilla y que los socialistas obtuvieran dos diputados, el PP se quedara con uno y el restante fuera a parar igualmente a Ciudadanos. Incluso una mínima caída porcentual del partido naranja podría dejarlo fuera del Congreso, también en favor de los socialistas.
Lo explica Kiko Llaneras en El País para el conjunto del Congreso: “El equilibrio entre cinco partidos es muy inestable y cambios pequeños en los votos pueden cambiar las mayorías con facilidad. Por ejemplo, si Vox alcanzase al 13 por ciento de votos (restándole al PP y Ciudadanos) podría lograr 40 escaños y elevar la suma de los tres partidos de la derecha hasta los 182 diputados”.
“¿Pero y si la izquierda se activase alrededor del PSOE? Si el PSOE se fuese hasta el 27% de votos, y la suma de PP, Ciudadanos y Vox cayese tres puntos, las dos mayorías viables serían la suma del PSOE y Ciudadanos (180 escaños) y el acuerdo entre PSOE, Podemos y los nacionalistas periféricos (189)”, añade.
*Encuesta realizada el 18 de febrero en la que han participado 1.050 personas.
